Los corchetes

Los corchetes son un signo ortográfico doble que se utiliza para incorporar información complementaria o aclaratoria. Se escriben pegados a los caracteres que encierran: […]

Se utilizan dentro de una transcripción o cita, para incluir comentarios o aclaraciones ajenos a la misma. En forma general se utilizan los corchetes cuando dentro de un paréntesis se debe incluir una aclaración:

Una de las últimas novelas que publicó Galdós (algunos estudiosos considera que obra Fortunata y Jacinta [1886-87] la mejor novela española del siglo XIX) fue El caballero encantado (1909).

Usos auxiliares de los corchetes 

• En libros de poesía se coloca un corchete de apertura delante de las últimas palabras de un verso cuando no se ha transcrito entero en una sola línea; en este caso, se coloca alineado a la derecha en el renglón siguiente:

“Y los ritmos indóciles vinieron acercándose,

juntándose en las sombras, huyéndose y
          [buscándose” 

• En las transcripciones se utilizan para marcar cualquier interpolación o modificación en el texto original (sea aclaraciones, correcciones, adiciones o el desarrollo de abreviaturas): Hay otros [templos] de esta misma época de los que no se conserva prácticamente nada; Subió la cue[s]ta con dificultad [en el original, cuenta]. Cuando se desarrolla una abreviatura o se corrige una palabras, no se deja espacio entre los caracteres a que se refiere y los corchetes (tanto el de apertura como el de cierre). 

• En las referencias bibliográficas, cualquier dato que no figure en la fuente: Ramón J. Sender: Adela y yo. [Barcelona]: Destino, [1978]; Antonio Fernández y Morales: Ensayos poéticos en dialecto berciano. León: [s. e.], 1861. 

• En textos de carácter lingüístico, se usan para encerrar las transcripciones fonéticas: enclave [eη’klaβe]. 

• Se usan tres puntos entre corchetes para indicar que en la transcripción de un texto se ha omitido un fragmento del original: “Pensé que él no pudo ver mi sonrisa […] por lo negra que estaba la noche”. 

• En las fórmulas matemáticas o químicas, para encerrar las operaciones que contienen otras ya encerradas entre paréntesis: [(4 + 2) x (5 + 3)] – (6 – 2).

Concurrencia con otros signos

Se utilizan las mismas reglas que se aplican para los paréntesis.

Fuente: Ortografía de la lengua española.